-Tengo hambre, ya te lo había dicho?
-Nop. Ya comiste?
-Hace tiempo estoy comiendo letras muy viejas, que ya no logran llenar el hueco que mi alma tiene, tengo hambre de palabras que me hagan vomitar por los dedos...
-...
-¿Me ayudarás?
jueves, 18 de marzo de 2010
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yo te ayudaré, de eso hablamos ¿no es así?
ResponderEliminarEntonces probablemente no sea un vomito lo que acontezca, sino, tal vez, un suave desliz, un murmullo hecho gotas tinta escurriendose bajo sus yemas, aunque claro el asunto esta en encontrar las tales letras.
ResponderEliminarTengo palabras absurdas, todo el asco del mundo, para una profunda emesis del alma.
ResponderEliminarY cuéntame, qué ha sido de ti?
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